jueves, 13 de mayo de 2010

Tipo de Gobiernos: Definiciones (según Karl Loewenstein)

Parlamentarismo: aquí se aspira a un equilibrio entre los independientes detentadores del poder por medio de la integración del gobierno en el parlamento (interdependencia por integración). Dentro de este tipo se diferencian el tipo clásico francés, en donde hay una preponderancia de la asamblea sobre el gobierno; el gobierno de gabinete británico, donde hay una superioridad del gabinete sobre el parlamento.
Presidencialismo: los detentadores independientes del poder, gobierno y parlamento, permanecen separados, pero están obligados constitucionalmente a cooperar en la formación de la voluntad estatal (interdependencia por coordinación). En este modelo está implicado el liderazgo del ejecutivo.

PARLAMENTARISMO
1º) el gobierno del rey - gabinete- necesita el apoyo de la mayoría del parlamento o, por lo menos, de la Cámara de los Comunes;
2º) la responsabilidad política del gabinete frente al Parlamento será asegurada de la mejor manera cuando sus miembros sean simultáneamente miembros del Parlamento.
El gobierno de gabinete propiamente se desarrolla accidentalmente por la formación de la figura del primer ministro, para representar al monarca en el consejo real en Inglaterra. Luego del siglo XIX, el dualismo originario de gabinete y corona se transformó en la configuración triangular del poder: Cámara de los Comunes- gabinete- electorado.
Gobierno parlamentario es el intento de establecer entre los dos independientes y separados detentadores del poder -asamblea y gobierno- un equilibro de tal manera, que ninguno pueda ganar ascendencia sobre el otro. En este dualismo, ambos detentadores del poder comparten las funciones de determinar la decisión política y de ejecutar dicha decisión por medio de la legislación. Ambos están sometidos a mutuas restricciones y controles donde el control político está distribuido entre ellos. Se reconoce al electorado como detentador supremo del poder ya que determina la composición de la asamblea y, por lo tanto, del gobierno.
El “tipo ideal” de esta configuración sería el equilibrio absoluto entre ambos detentadores independientes del poder, gobierno y parlamento, sometido periódicamente a una nueva orientación política por el veredicto del electorado. Pero casi en todos los tiempos, el uno o el otro detentador del poder ha pesado más en la balanza de la dinámica del poder.
Elementos del Parlamentarismo:
1º) los miembros del gobierno o del gabinete son al mismo tiempo miembros del parlamento. Esto se debe a que la asamblea puede ejercer un mejor control sobre sus propios miembros que sobre elementos extraños a ella.
2º) el gobierno o gabinete está constituido por los jefes del partido mayoritario o de los partidos que, uniéndose en coalición, forman una mayoría. El gabinete es un comité de la asamblea; el gobierno está fusionado con el parlamento, formando parte de éste. Pero, a pesar de esto, ambos detentadores del poder están separados funcionalmente y son independientes.
3º) el gobierno o, respectivamente, el gabinete mismo tiene una estructura en forma de pirámide con un primer ministro o presidente del consejo a su cabeza, reconocido como líder.
4º) el gobierno permanecerá en el poder siempre y cuando cuente con el apoyo de la mayoría de los miembros del parlamento.
5º) Control político: ambos detentadores del poder operan con recíprocas facultades y posibilidades de control, que además deberán ser realmente utilizadas. El instrumento más eficaz con el que cuenta el parlamento es la posibilidad permanente de exigir responsabilidad política al gobierno. Otro recurso del control parlamentario es el voto de censura acordado por la mayoría del parlamento al gobierno o la negativa a conceder el voto de confianza pedido por el gobierno. La consecuente dimisión del Gobierno conduce bien a la disolución del parlamento y a nuevas elecciones o a un cambio del gabinete.

PRESIDENCIALISMO
Sistema gubernamental americano: gobierno de separación de poderes.  
Hay una recíproca interdependencia entre el presidente y el Congreso. El presidente no está obligado en absoluto a presentar cuentas al Congreso. El Congreso no puede destituir al presidente de su cargo, y tampoco a un miembro de su gabinete. (en principio)
El Congreso permanece también en su cargo durante el período previsto constitucionalmente. El presidente no podrá disolver el Congreso. Excluyendo radicalmente cualquier identidad personal entre un miembro del congreso y otro del gabinete o de la administración, se hace imposible la interdependencia por integración, esencia del parlamentarismo.
El partido político se convierte en el lazo entre los diversos detentadores de poder, aislados constitucionalmente por la separación de poderes. Hay dos razones principales por las que el presidente no puede imponer su voluntad al Congreso. Primeramente, suele ocurrir que el partido del presidente pierde la mayoría en una de las dos cámaras con ocasión de las elecciones intermedias, que tienen lugar hacia la mitad del período de su cargo. Los partidos americanos en el Congreso se caracterizan por la ausencia de disciplina de partido. Esto se da en parte porque el presidente no posee el derecho de disolver el Congreso: los miembros del Congreso son inamovibles.
Las condiciones casi anárquicas en el Congreso contribuyen a aumentar las dificultades para llevar a cabo el liderazgo político presidencial, que no podrá apoyarse ni en la lealtad ni en la disciplina de partido. 
El régimen de gobierno americano y la nueva división tripartita de las funciones estatales.
El pueblo, organizado como electorado en los partidos políticos, toma parte en el control político. Pero el ejercicio de este control no es ni continuado ni actualizable: estará paralizado durante el mandato y sólo se activará en épocas de elecciones.
El poder judicial también tiene mecanismos de control a su disposición: derecho de invalidar las leyes del Congreso por ser incompatibles con la Constitución (control judicial de la constitucionalidad de las leyes).